Tuesday, June 17, 2008

Response to Salcedo

Thank you all for your comments on the previous posting. In particular, I'd like to thank Salcedo for addressing an issue that has kept me thinking for ever, not quite able to come up with a solution. I will try now to engage with Salcedo's point.

Salcedo, I've thought about it many times, about the how could we possible channel out the pent up anger, built over decades of abuse. Anger, as you well put it, that spits out in whatever interaction we see that touches on any sensitivities. Let's see how far can the therapy setting get us in terms of possible solutions: When there is hurt in a relationship the only way to avoid the anger is by letting the other person know that what they are doing or have done has caused pain in us. It's not a small feat, however. It takes a lot to expose our vulnerability, to appear to the other as someone "weak", it can be embarrassing to some and just simply unbearable to others. If by any chance this hypothetical person has done this in the past and received further attack or abuse, the chances of exposing such vulnerabilities in the future will be slim.

Here is a situation I have thought about many times and I even have the vague recollection of having mentioned it before on this blog, bullying. Those of us who live in North America and who have children in the school system know how sensitive this topic has become over the last 10-15 years and how the focus has switched from the victim to the victimizer. From "what's wrong with this kid who is picked on" to "what's wrong with this kid who is so mean and abusive". I think you can appreciate how momentous this switch is and what profound implications it has in terms of what you have asked in terms of resolving the built-up anger in Cuba. If anger is avoided by talking about pain, then it will take a society where pain and vulnerability are not sources of shame for it to happen.

In Cuba (and by extension, in any macho society) going to someone and saying this person wronged me by cheating on me, by hitting me, by sexually molesting me, by making fun of me, by humiliating me, by degrading me is not conceivable because you will get no compassion but rather disdain and rejection. You will automatically become a "trajin", a "tarru", a "penco", a "maricon" and a social outcast, laughed at and taunted to "do something about it", something violent that will definitely redeem your value as a man, or a woman. In a society where vulnerability is a source of shame there is barely a chance that anger can be averted. Cuba's is such a society and, sadly, it is a place where empathy is a word never used, let alone understood.

In a couple where letting your partner know that what they have done has caused you pain is used as ammo for further attacks, there is barely a chance of averting anger and withdrawal. It happens for example when you open up to your partner, you tell them about your past, your growing up, your relationship with your parents, your siblings, your peers, and so on, and what you get is either unresponsiveness or laughter or such information is dutifully stored for further used during an argument ("no wonder you are like this, this is what your father was like too") there is barely an opportunity for soothing intimacy. Hurt will trigger anger; anger begets anger. All done to avoid the shame associated with being weak. We will show ourselves to others as mean, powerful and vengeful not as vulnerable and in need of emotional repair.

With that in mind, Salcedo, I look with doubtful eyes but also with hope to where in time and how could we in Cuba begin such necessary process.

4 comments:

Jorge Salcedo said...

That's a good starting point, let's see who dares to come forward mostrando las nalgas.

I just saw the post. Thanks for taking the time to address this point. I'll get back to you tomorrow. But now my wife is calling and I don't want to hear the story about me cheating on her with the computer, just like my father…

parejanoverbal said...

Salcedo, that's the point, no one will ever show their bums unless it is safe to do so. In essence, that's is what I deal with in my work, I have to pass many tests before my clients can trust me enough that they can venture their thoughts out, let me know about their pain. Essentially, also, this process is no different from what transpires in any kind of emotional relationship (familial, friendship, love). No one does (and no one should) go out on a limb and expose himself/herself without testing the waters.

To underline the main point from before, only when vulnerability is not associated with shame can a person (or a society) talk about the pain and let go of anger as a protective resource.

Jorge Salcedo said...

Todo lo que señalas me parece muy acertado. Ahora bien, creo que los pasos que propones para romper el círculo vicioso de violencia-dolor-represalia pueden funcionar bien en el marco de las relaciones interpersonales, pero no sé en qué medida son aplicables a las relaciones sociales, donde la dinámica del grupo no depende de la acción deliberada de ningún individuo.

Creo que un cubano más "débil", vulnerable, expuesto, abierto, sería mejor para Cuba. No es que nos haga falta un cubano afeminado, sino una sociedad donde los principios femeninos y masculinos tengan un mejor balance. La mujer cubana, como mujer, todavía no ha entrado en la historia.

Puesto de otro modo, la batalla por una Cuba vivible sólo se puede ganar con una guerra asimétrica, donde los principios femeninos le salgan al paso a los masculinos. Este lenguaje de batallas y guerras —dicho sea de paso— demuestra que yo no soy parte de la solución.

Lo que está claro para mí a estas alturas es que nuestros problemas no son primeramente políticos, sino que afectan la convivencia entre nosotros, a cualquier nivel. Y ahí está la blogosfera cubana para probarlo.

Pongo el caso de la blogosfera porque, a diferencia de la vida pública en Cuba, restringida por fuerza, nuestra blogosfera no tiene más limitaciones que las que nosotros le ponemos. Al menos de este lado. Y nuestra blogosfera es como un tejido que está siempre descosiéndose o a punto de rasgarse. No es que haya conflicto, algo inevitable y saludable, sino que el conflicto amenaza continuamente con destrozar la relación, con acabar la sociedad. Y la puede acabar.

Y es ahí, precisamente, donde yo creo que está Cuba.

parejanoverbal said...

Me has hecho sonreir con eso de la batalla de los principios y el lenguaje guerrerista. Dicho sea tambien de paso, en el psicoanalisis se utilizo por mucho tiempo un tipo de expresion que hacia lucir el encuentro terapeutico como un campo de batalla donde el paciente se "defendia" y el analista "atacaba" con interpretaciones tipo misil, rafaga, bombas de explosion retardada, etc. Tienes razon, creo que si uno aborda el asunto viendolo como guerra habran condiciones y resultados acorde con ello.

No he seguido muy de cerca el debate reciente acerca en la blogosfera cubana. De pasada me parecio entender que se cuestionaba la posibilidad de un congreso blogger. De ahi se salto a de si era apolitico o no. Creo que a la base de ese debate esta el tema de que hacer con el pasado traumatico, si es mejor dejarlo ir y olvidar, pasar la pagina, o si hay que confrontarlo, hacer pagar por el dolor, etc. Y ese es, pienso, el tema central en Cuba.

Que hacer entonces con el dolor de aquellos que han sufrido perdidas de familiares o que han sido vejados y como hablar de ello sin que se pida venganza. Ese es un tema.

Desde mi armchair (con el sentido academico que esto implica) a mi me preocupa saber que uno de los efectos mas negativos del trauma (en sentido general) es el de que las victimas se convierten en victimarios, por un lado, y el de que se trata siempre de repetir la escena traumatica, en busca de un acomodo psicologico.

Castro han impuesto un modelo "bully" de como lidiar con las diferencias y es el que ha usado para hablar de Yoani, el que usa siempre para ofender personalmente a sus oponentes y en el que, casualmente, el termino "maricon" siempre sale a relucir. Ese modelo de ofender antes de dar razones impone la idea de "ganar" a toda costa en vez de entender lo que dice el otro y de tratar de buscar un entendimiento.

Ultimamente me he interesado en las consecuencias de una observacion curiosa. Es la de que en el español que usamos en Cuba no existen ciertos terminos que en ingles son muy comunes al hablar del tema de parejas. Espresiones como "settle for" y "rebound relationship" no tienen equivalentes directos en Cuba. Se ha de recurrir a explicar la frase y surjen cosas como "un clavo saca a otro", que es ciertamente la idea en rebound, pero que deja claro que no existe "un" termino. De la misma forma, no existe una palabra en español que tenga el peso relacional del termino "negotiation", entendido en el sentido de cuando decimos en ingles "to negotiate a corner". En mi "reflexion", me viene a la mente el como en la caricatura paternalista de las culturas indigenas se dice que los nativos, al faltarle el termino adecuado, hablan de "el pajaro de hierro" o "el agua de fuego". Yo quisiera realmente pensar que soy un paternalista americanizado, pero mucho me temo en el tema de las relaciones sentimentales y de la comunicacion con los otros somos unos pre-"freudinos", y que no existe una cultura adecuada para hablar de las emociones, los sentimientos, y que se tiende a pensar o que es algo cheo, o que es debil, o que no es apropiado, o que como dices puede ser visto como "femenino", o que se yo.

El bottom line es que no hay un saber de que hacer en las relaciones. Y este desconocimiento tiene mil y una aristas, esta por ejemplo en el no saber como disculparnos, como pedir perdon, y como demandar una disculpa, tambien. Esta en ser agresivo por que no se sabe ser asertivo. Esta, Salcedo, en querer ganar, compadre. Y cualquier terapeuta de parejas te puede decir esto: En una relacion de parejas, el que gana, pierde.