"Reconcilable difference: Marriages end. Families don't" (Diferencias reconcilliables: los matrimonios terminan. las familias no) escrito por Cate Cochran es el libro que estoy leyendo ahora y que queria recomendar. Son 10 casos de parejas que terminaron pero que han sido capaces de mantenerse unidos como familia. Quien lo escribe es una periodista y no una profesional y por eso esta escrito de una manera muy sencilla y con una naivete que a veces me llega a molestar porque veo cosas que ella no ve o no puede ver. Sin embargo, como fuente de historias y como fuente de ejemplos reales de como se las arregla la gente en casos de separacion, esta bien.
Uno de los temas fundamentales en estos 10 casos es el de la relacion deseo-amor, o sexualidad-companerismo y de como estas parejas decidieron en algun momento optar por la via del deseo antes que seguir en la rutina de la relacion de amistad, el desgano, el conformismo. Este sigue siendo uno de los temas mas comunes en todo tratamiento posible de parejas.
Wednesday, January 16, 2008
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7 comments:
Muy buen tema, que funciona en mi experiencia solo hast que no aparezca un tercero(a) que le importe tres pepinos la familia que tuvo su pareja. Pienso que si el amor de pareja se acaba, aun puede existir un sentimiento, digamos de agradecimiento por el tiempo compartido y la familia creada, pero son pocos los que mantienen estas tradiciones, quizas es falta de madurez o de mente amplia, no se...
muy bueba tu acotacion. De hecho es asi mismo. Muchas parejas que se divorcian y siguen en plan "aun somos familia" sufren a veces grandes presiones, desencantos, crisis de lealtades, etc., cuando aparece un tercero o tercera que diga "se acabo la diversion". El primer caso del libro es interesante en ese sentido: Un matrimonio con dos hijos, ella empieza una relacion con una amiga, la amiga se muda al cuarto, el se va al sotano de la casa, y logran mantener una familia de 3 hijos, dos mujeres, y un hombre sotanero. Asi por 10 anios. Al fin, el tipo comoce a una mujer y esta se muda, tambien, a la casa. Ahi fue donde ardio Troya. Al fin de la batalla, lograron independizarse, y aun se reunen para las fiestas de navidad. Di tu.
Pues esa historia que cuentas esta que ni Woody Allen la hubiera hecho mejor. Ves, eso es lo que yo digo, hay que ser civilizados. En mi opinion esta muy bien, y claro entiendo a la cuarta pata de la mesa, pero fijate que la historia termina en que se siguen reuniendo de cuando en vez. Creo que eso esta muy bien. Toda relacion merece un espacio en la vida. Perfo hay quienes no son asi, aunque en mi experiencia en casi todos esos casos funciona un superego retorcido.
Hola, ¿pero eso que cuentas pasó en Cuba? porque no veo por qué motivo tienen que quedarse a vivir en la misma casa, una cosa es que sigan manteniendo una relación civilizada sobre todo porque hay hijos de por medio y otra todo ese contubernio, vamos digo yo.
nada, Lola, nada...sucedio aqui mismo en Toronto. Es un libro de una periodista local, que paso ella misma por una version similar y que entrevisto a muchas parejas para este libro. la histotia, Medea, es mucho mas jugosa de lo que aqui cuento, y hay cuestiones con uno de los hijos que luego resulta que es gay, con la nueva mujer, con el como dividen la casa, etc. La razon que se daba el tipo es que el no queria que sus hijos crecieran sin el ahi.
Vaya ¡y yo que creía que las telenovelas eran exageraciones! bien dicen que la realidad supera a la ficción. :))
Saludos!
Imaginate, Lola, que Freud ya hablaba de "la novela familiar del neurotico" a principios del siglo XX...
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